He querido para finalizar éste año 2011, realizar una revisión más personal que derivada de los aportes oficiales de las disciplinas que normalmente abordan éste tema, con el compromiso de posteriormente realizar el escrito pertinente.
En mi criterio, las apariciones de las deidades puede ser obra de la falta de explicación de los porqués a las diferentes situaciones y mentes ingenuas, humanas -que buscan la verdad- curiosas no dudaron en tildar la existencia de dioses a lo, en su momento, inexplicable.
Sin embargo, partiendo del mismo modelo teológico o religioso, los primeros seres humanos podían ver y entrar en contacto con los ángeles, dioses y con Dios Padre, como lo confirman las escrituras sagradas de las diferentes religiones y la 'sabiduría popular' o cultura expresadas en mitos y leyendas que pasaron de padres a hijos de generación en generación.
Situaciones que hoy día encuentran en libros, vídeos, cuentos, que son consideradas como invenciones de nuestras prodigiosas mentes, pero que para mi son la posibilidad de no perder ese contacto que tuvieron nuestros primeros padres dadas sus experiencias y pureza para poder ver a tales seres del mundo 'invisible', que por la contaminación o por la descendencia-en contraposición a la ascensión y purificación o perfección-.
Que pasaría si hoy se nos aparece un espíritu o un ángel, lo primero es ver donde está el truco, podríamos creer que es un extraterrestre pero muy pocos que sea un mensajero de Dios Padre, la Suprema Sabiduría.
El nivel de conocimiento tecnológico y científico no lleva a pensar que no es posible que nos pueda visitar un ángel o cuando vemos un espíritu nos convencen los psicólogos y los siquiatras que es locura, todo menos la posibilidad de ese encuentro real y de la forma de abordarlo, sin tener una crisis mental o existencial.
Nuestros antepasados pudieron ver los Hijos de Dios, llamados semidioses, ver: www.apocatastasis.com/glosario-dioses-heroes-mitologia-griega; //www.diomedes.com/diosesolimpo.
En todas las versiones se coincide en un reino espiritual y nuestro mundo físico, y en la existencia de los hijos de Dios en dos sentidos en el primero: los hijos materializados-ángeles- o los concebidos a través de relaciones de los ángeles con las hijas de los hombres o por fecundación divina- léase, fecundación sin sexo- y la segunda clasificación que es la espiritual pues todos somos espíritu e hijos de Dios, hechos a su imagen y semejanza en espíritu.
De cualquier manera, los hijos de Dios y de sus compañeros de la denominada primera corte diosesana, pues tenían y tienen facultades más desarrolladas que las que nos, tenemos, como las llamadas metafísicas: clarividencia, telepatía, fuerza, etc., al estilo de Hércules, Sansón, semejantes a las tenidas por los reyes o emperadores que eran declarados dioses o semidioses por el nivel superior, frente al promedio, de las personas que les rodeaban y cuyo pecado consistía en permitir ser adorados como Dios Padre, violando así el primer gran mandamiento, de no tener otros dioses a parte de Dios Padre, ni inclinarse ante ellos o rendirles culto.
Al entrar en contacto con los seres humanos los Hijos de Dios, aceptaron sus culturas y terminaron haciendo lo prohibido por Dios Padre, Suprema Sabiduría, con las consecuencias que todos conocemos.
Las historias modernas encantan a nuestros niños y los adultos que no olvidan o no quieren olvidar la verdad espiritual así sea, en muchos casos, manipuladas para apartar del bien o si se entra en tal corriente ser desviados hacia la parte oscura, 'de la fuerza', al tenor' de las guerra de las galaxias.
